En la arquitectura y el diseño
actuales, se exigen nuevos hábitos de consumo para conseguir espacios que
respeten el medio ambiente de una manera seria.
En el año 2005 el consumo de
dióxido de carbono en la atmósfera alcanzó niveles altísimos, siendo un récord.
Por ello es aconsejable que los materiales que se elijan para realizar la
construcción de los edificios no tengan contaminantes en su constitución.
Los materiales que deben
utilizarse y que deben pensarse a la hora de realizar el diseño de casas, son
aquellos transpirables, térmicos y que puedan volverse a utilizar. Siguiendo
estas características, podemos hablar de la cal hidráulica, los cementos que no
contengan aditivos, sistemas estructurales con madera, geotextiles a base de
fibra de polipropileno, termoarcilla, caucho.
Diseños de casas con estructuras no contaminantes
Para la realización de la
estructura, hay que contemplar en el diseño de la casa que no se utilicen los
impermeabilizantes bituminosos, así como elementos que no transpiren como
pueden ser aquellos que contengan fibrocemento de poro cerrado.
Condiciones para el diseño de casas sanas
Para decidir los materiales a
utilizar en las viviendas que se van a construir, hay que contemplar algunos
aspectos para conseguir reducir los contaminantes.
Por cada edificio que se
construye, por metro cuadrado, se considera que se gastan casi tres toneladas
de materiales. El impacto ambiental por lo tanto es grande, con lo que
necesitamos rebajarlo.
El gasto energético que se
produce para su extracción, así como el transporte necesario para llevar el
producto a obra son fundamentales para poder reducir el contaminante.
Otros elementos a considerar son
los aditivos que se incorporan al cemento. Casi todos son peligrosos. La
radiactividad de pizarras y granitos es necesario medir, a la vez que se debe
exigir que todos los elementos estructurales y armazones metálicas deben
derivar a tierra.
Diseño de la vivienda con aislamientos sostenibles
El primer aspecto a considerar
para tener una vivienda sostenible es que el diseño de casas debe responder a
las condiciones climáticas del terreno. Aquellos lugares en los que el sol debe
evitarse por las elevadas temperaturas, no pueden colocarse grandes
acristalamientos con esa orientación, solo por citar un ejemplo.
Los materiales aislantes pueden
reducir en una forma tremenda la necesidad de gasto de energía. Mejorando los
aislamientos se puede ahorrar hasta un 35% en climatización, por lo que vale la
pena hacer caso de este punto.
El doble cristal, con amplia
cámara de aire suele reducir las emisiones. Doble cristal y perfilería estanca
suelen reducir un 25% el gasto.
La mayoría de los paneles
aislantes no son sanos. Las espumas de poliuretano tienen poro cerrado y las
fibras minerales pueden desprender sustancias nocivas. Es preferible utilizar
materiales naturales, sin tratamientos químicos.
Cuidado en el consumo de agua y luz
La calefacción y la refrigeración
representan la mitad del gasto anual de electricidad, por lo que son aspectos en los que hay que
hacer énfasis para el ahorro. Una buena aislación de la vivienda permitirá un
gran ahorro a lo largo del baño.
Hay que actuar con sentido común
a la hora de conseguir ahorrar en la vivienda, como es el caso del uso de
cortinas y persianas, o incluso toldos para evitar la acción directa del sol.
En cuanto a la refrigeración, no
vale la pena que la diferencia entre interior y exterior no sea superior a los
12 grados.
En cuanto a la calefacción, se
recomiendan que al diseñar la vivienda, se contemple el uso de las estufas de hierro fundido que quemen biomasa, ya sea de pellets
o leña de poda. El gas en su producción es menos contaminante que el gasoil o
el petróleo, y además permite ahorrar un 30% con respecto a la electricidad.
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